¿Encías inflamadas? Descubre las posibles causas
En un estado normal y saludable, las encías tienen un color rosado y un aspecto firme. Si notas que tus encías están inflamadas, enrojecidas o hinchadas, es posible que se deba a alguna de las siguientes causas:
1. Enfermedad de las encías.
La acumulación de placa en los dientes y en la línea gingival, puede provocar que estas se irriten e inflamen. Si la placa bacteriana no se retira con la regularidad necesaria, se puede desarrollar gingivitis.
Esta etapa, que es el primer estadio de la enfermedad de las encías, es reversible con una rutina de higiene completa. Pero si no se retira la placa o se hace de forma insuficiente, puede empeorar y derivar en periodontitis. Esta es la forma más avanzada de la enfermedad de las encías y para corregirla es necesario acudir al dentista.
Si la periodontitis, también conocida como piorrea, no se trata, puede terminar en la pérdida de la pieza dental.
En caso de sospechar que puedes estar ante un caso de gingivitis o periodontitis, debes acudir a la consulta de tu dentista. Él o ella te indicarán la mejor manera de proceder según tu caso particular.
La enfermedad de las encías en datos:
En España, más de 8 millones de personas sufren enfermedad periodontal. De ellos, 2 millones la padecen en su forma severa. A nivel europeo, se estima que alrededor del 50% de la población adulta presenta algún tipo de enfermedad periodontal. Entre los factores de riesgo se encuentran el tabaquismo, con hasta 7 veces más posibilidades de desarrollar enfermedad de las encías. Otros factores son el consumo de alcohol, que eleva un 40% el riesgo, o el estrés, que lo aumenta en un 43%. Además, los hombres y las personas de más de 40 años tienen más opciones de desarrollar enfermedad periodontal.
¿Cómo prevenirla?
Prevenir la enfermedad de las encías es sencillo. Tan solo tienes que seguir una rutina de higiene oral completa que combine el cepillado, la higiene interdental y enjuague. Además, es muy importante también mantener un estilo de vida saludable y acudir con regularidad a la consulta dental.
Recuerda que si te sangran las encías o las tienes inflamadas, debes acudir a tu dentista o higienista de referencia.
2. Aftas en la boca:
Las llagas en la boca pueden aparecer en cualquier zona de la boca. También en las encías, haciendo que sangren o estén inflamadas. Aunque suelen desaparecer solas al cabo de unos días, debes buscar un producto que alivie el dolor de forma rápida. Además, este producto debe estimular la regeneración. ¡Descubre GUM® AftaClear, nuestra gama para las aftas!
3. Ortodoncia:
En ocasiones, las encías reaccionan a la presencia de elementos de ortondoncia o brackets aumentando su tamaño y creciendo. Este es un problema común en adolescentes y puede deberse a una aparatología mal ajustada. También es posible que, al dificultarse la higiene por llevar aparato, esta no se esté realizando de manera correcta. Esto significa que las bacterias pueden acumularse en tus dientes y encías produciendo encías inflamadas o enrojecidas.
4. Cepillado agresivo:
El tejido gingival es muy sensible, por lo que un cepillado agresivo puede provocar dolor o inflamación. Si crees que este es tu caso, descubre más sobre cómo mejorar la técnica de cepillado.