Definición Bruxismo
El bruxismo, también conocido como "rechinar los dientes", es una manifestación psicosomática involuntaria relacionada principalmente con el estrés.
Síntomas: los dientes superiores e inferiores se frotan uno encima del otro, inconscientemente, provocando un ruido de rechinamiento. Los dientes se desgastan y se vuelven "más cortos ". La presión excesiva puede provocar grietas o fracturas dentales y dolor en la mandíbula.
Causas: a menudo siguen siendo desconocidas, pero se asocia con frecuencia con trastornos del sueño.
Tratamiento: reducción del estrés, manejo de los trastornos del sueño y uso de un alineador o férula de descarga.
Bruxismo: definición
El bruxismo es una afección en la que una persona aprieta o rechina los dientes de forma involuntaria. Los dientes superiores se frotan con los dientes inferiores con movimientos inconscientes hacia adelante y hacia atrás. Se hace una distinción entre el bruxismo diurno, que ocurre durante el día, y el bruxismo nocturno, que ocurre durante el sueño.
Bruxismo diurno
Es más común en niños y se caracteriza por contracciones musculares sostenidas que duran más de 2 segundos, que ocurren en situaciones estresantes o ansiosas y aumentan a lo largo del día.
Bruxismo nocturno
Su frecuencia aumenta con la edad, por lo que afecta más a los adultos y a una mayor proporción de mujeres. Se caracteriza por contracciones breves y repetidas de los músculos de la mandíbula que pueden durar hasta 2 minutos. Su aparición aumenta durante la noche y disminuye gradualmente en la mañana después de despertarse.
¿Cuáles son las consecuencias del bruxismo?
Las consecuencias son varias e importantes:
- Desgaste dental, con posibilidad de fracturas o grietas.
- Ruidos dentales o percepciones auditivas rechinar los dientes.
- Dolor dental relacionado con la actividad repetitiva y la presión oclusal.
El desgaste gradual de los dientes eventualmente conduce a dientes más cortos y una sensación de que están agrandados. El desgaste afecta primero al esmalte, luego a la dentina.
Este fenómeno conduce a maloclusiones dentales y altera la masticación, incluso la deglución y el habla.
Hay dolores musculares y articulares en la mandíbula.
Las grietas y fracturas son frecuentes, causando lesiones del esmalte que pueden extenderse a la pulpa dental, con riesgo de infección.
¿Qué causa el bruxismo?
Las causas no siempre se conocen, pero los factores contribuyentes se han identificado claramente:
- Trastornos del sueño, como ronquidos y apnea del sueño (múltiples pausas en la respiración durante el sueño).
- El estrés y la ansiedad, que también afectan el sueño, se asocian muy a menudo con el bruxismo.
- Estilo de vida: fumar, consumo excesivo de café, alcohol.
¿Qué hacer contra el bruxismo?
La mayoría de las veces se diagnostica en presencia de dolor de mandíbula y dientes desgastados y acortados.
Controlar el estrés, la ansiedad y tratar los trastornos del sueño generalmente lo mejora.
Al mismo tiempo, se toman medidas para reducir el dolor al masticar y prevenir el desgaste de los dientes para evitar consecuencias más graves. Los alineadores o férulas de descarga se usan comúnmente, pero no tratan la causa del bruxismo. Hechos de plástico moldeado a medida a partir de una impresión dental, evitan el contacto directo entre los dientes superiores e inferiores.
A veces se requiere tratamiento protésico. En cualquier caso, si crees que rechinas los dientes y quieres protegerlos, no dudes en consultar con tu dentista.