Cómo la salud oral está afectando tu salud en general
Más comúnmente conocida como enfermedad de las encías, la periodontitis es la sexta condición de salud más común a nivel mundial. Según la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades periodontales graves afectan a alrededor del 19% de la población mundial y, en general, las enfermedades orales afectan a unos 3.500 millones de personas.
Los problemas de salud oral son increíblemente frecuentes en Colombia. Y esto se vuelve aún más urgente cuando se considera la relación profunda y compleja entre la salud oral y la salud en general.
Las asociaciones entre las enfermedades periodontales y las afecciones sistémicas (es decir, que afectan a todo el cuerpo) se han estudiado ampliamente, a menudo atribuidas a la presencia de bacterias en el torrente sanguíneo y proteínas proinflamatorias que pueden afectar otras partes del cuerpo. Estas asociaciones ocurren a través de vías subyacentes compartidas y la exposición a factores de riesgo comunes, como la edad, el estado socioeconómico y las opciones de estilo de vida.
La investigación científica nos ha ayudado a comprender estos vínculos con mayor claridad, subrayando la importancia de manejar estos factores de riesgo y priorizar un excelente cuidado bucal para aquellos con rasgos predisponentes.
Aquí exploraremos algunas de las asociaciones conocidas entre la salud oral y la salud en general, incluidos los vínculos con enfermedades sistémicas, las implicaciones del embarazo y una variedad de otras asociaciones potenciales.
Salud bucodental y enfermedades sistémicas
Como hemos explorado en el pasado, la investigación ha sacado a la luz docenas de vínculos entre los problemas de salud sistémicos y la enfermedad de las encías. Explicado extensamente en el artículo vinculado, estos vínculos sistémicos se han visto con una serie de condiciones muy comunes, que incluyen:
- Diabetes
- Enfermedad cardiovascular
- Alzheimer
- Cáncer
- Artritis reumatoide
Obviamente, todos estos son problemas de salud muy graves. Si tienes una predisposición genética a cualquiera de ellos, es aconsejable poner especial énfasis en cuidar mucho tus dientes y encías para evitar problemas de salud oral que podrían exacerbar o complicar enfermedades no transmisibles como estas. Familiarízate con los síntomas e indicadores de cada uno, y adopta un enfoque proactivo para comunicarte con tu dentista y médico sobre cualquier inquietud.
Salud bucal y embarazo
Durante el embarazo, te recomendamos que seas especialmente consciente de la conexión entre tu salud oral y la salud en general, ¡sin mencionar la salud general de tu pequeño!
Muchas mujeres, hasta un 67-100%, experimentan gingivitis durante el embarazo, incluso aquellas que están cuidando bien su salud oral y podrían no haber tenido tales problemas en el pasado. Esta respuesta inflamatoria aumentada es la reacción natural del cuerpo a un aumento de las hormonas sexuales. A pesar de que es muy común, aún debes hablar con tu profesional dental sobre cualquier inquietud que puedas tener.
Sabiendo que tus encías pueden ser un poco más sensibles, intencionalmente ten mayor cuidado con tu rutina de cuidado bucal, incluso en medio de la gingivitis del embarazo.
Cepíllate dos veces al día con una crema dental con flúor y asegúrete de limpiar interdentalmente todos los días.
Algunos otros factores de salud oral a tener en cuenta durante un embarazo:
- Las mujeres a veces experimentan un aumento en la producción de saliva durante el embarazo. Esto es normal.
- Para aquellas que experimentan náuseas matutinas, es aconsejable no cepillarse los dientes dentro de una hora de vomitar, ya que el ácido gástrico puede hacer que los dientes sean más susceptibles al desgaste de los abrasivos en la pasta de dientes.
Otras implicaciones generales de los problemas de salud oral
Los estudios han identificado una serie de efectos de salud más pequeños y más sutiles que se remontan a la salud oral, algunos de los cuales pueden estar relacionados con los problemas de salud sistémicos citados anteriormente.
1. Falta de apetito
Se han realizado estudios sobre la relación entre la mala salud bucal y los trastornos alimentarios, pero a un nivel más general, el dolor de dientes y encías tiene la propensión a alterar los hábitos alimenticios por la sencilla razón de que puede doler morder y masticar. Si encuentras que los problemas de salud oral están afectando tu deseo o capacidad de comer los alimentos que normalmente disfrutas, especialmente aquellos que ayudan a mantener a raya la gingivitis, debe servir como un aviso inmediato para ir a ver a tu dentista.
2. Gravedad del COVID-19
Dado que las preocupaciones sobre la pandemia de coronavirus continúan, es vital que todos permanezcamos vigilantes contra sus muchos impactos e implicaciones. La conexión entre la salud oral y COVID-19 se ha centrado más en el estudio de la comunidad médica.
Existe evidencia de que la enfermedad avanzada de las encías puede hacer que una persona sea más propensa a sufrir complicaciones por COVID-19, incluida la admisión en la UCI, la necesidad de asistencia respiratoria y la muerte. Al mismo tiempo, una buena salud oral puede reducir los resultados fatales.
3. Depresión
Un estudio de más de 13,000 pacientes de prácticas generales en el Reino Unido "demostró una asociación entre la gingivitis crónica y la depresión posterior". El vínculo se observó en hombres y mujeres de todos los grupos de edad.
Esto es especialmente preocupante porque puede conducir a patrones autosostenibles y deteriorar la salud oral. Como explicó el Dr. Samuel Low en un informe con DentistryIQ:
Personas de todo el mundo están luchando con su salud mental durante los tiempos difíciles que enfrentamos. Si estás entre ellos, no te sientas solo y no dudes en buscar ayuda.
¿Qué debes hacer?
Como reiteran estos ejemplos principales, tu salud oral y tu salud general están interrelacionadas de manera profunda y fundamental. Si notas alguno de estos efectos y sospechas que pueden relacionarse de alguna manera con tu salud oral, vale la pena ponerse en contacto con tu médico y dentista para formar un plan.
En general, utiliza esta información como un motivador para crear y mantener un estilo de vida saludable que proteja tanto tu salud oral como tu salud general.
Mitigar los factores de riesgo del estilo de vida, como fumar, beber, la mala alimentación y la falta de ejercicio, pueden beneficiar el bienestar de múltiples maneras.